El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, encabezó con solemnidad y orgullo la conmemoración del 111 aniversario de la creación de las Fuerzas Armadas mexicanas, llevada a cabo en el complejo de la Industria Militar en Puebla. En un emotivo discurso, el mandatario destacó la importancia trascendental del apoyo brindado por las Fuerzas Armadas en el proceso de transformación pacífica que vive el país, aludiendo a una «revolución de las conciencias» en la que su contribución ha sido fundamental.
López Obrador rechazó categóricamente las acusaciones de militarización vertidas por ciertos sectores opositores, argumentando que el respaldo popular hacia la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y la Secretaría de Marina (Semar) es evidente, con una aprobación cercana al 85%. Para respaldar su afirmación, repasó los hitos más significativos alcanzados por el Ejército durante su sexenio, entre los que se destacan la construcción del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles en la capital mexicana, el apoyo prestado para el proyecto del Tren Maya que conectará diversos estados del sureste mexicano, así como la entrega de recursos materiales y humanos durante la crisis sanitaria provocada por la pandemia de COVID-19.
Asimismo, enfatizó los logros obtenidos gracias a la gestión militar en las aduanas terrestres, donde se ha logrado combatir el contrabando, detener el narcotráfico y aumentar significativamente la recaudación de ingresos en los puntos fronterizos del país.
El presidente también reiteró su propuesta de reforma constitucional para integrar la Guardia Nacional (GN) a la Sedena, argumentando que esta medida es crucial para preservar la vocación de protección a la ciudadanía y evitar posibles casos de corrupción en el organismo.
Por su parte, el comandante del Ejército, Celestino Ávila Estudillo, expresó su agradecimiento por la confianza depositada por el Gobierno de López Obrador y reafirmó el compromiso de las Fuerzas Armadas de ser cada vez más eficientes en sus actuaciones, manteniendo intacta la esencia de su creación y la confianza otorgada por la ciudadanía.
En un cierre emotivo, López Obrador elogió la labor del personal militar, al que describió como «pueblo uniformado», caracterizando a estos hombres y mujeres como trabajadores leales y patriotas. Con un fervoroso «¡Viva el Ejército Nacional y viva México!», el presidente concluyó su intervención, resaltando la importancia y el compromiso perpetuo del país con sus fuerzas armadas.